Laguna

Cerca al ocaso, caminando de la mano, una pequeña ciudad y su laguna siendo testigos de aquel par. Aquellos conociéndose, riéndose de las casualidades. Con la cara roja y una mano temblorosa sujetando una pequeña hoja de papel, pidiéndole a ella un minuto para su recital. Fue este el simple protocolo para hacerle saber cuánto quería quererla, tal vez de la única forma en la que él sabía expresarlo.

Laguna

No pienso, no existo. Luego te veo y mis ojos brillan,
y las noches frías se vuelven tibias, y caigo en la cuenta de que los años
pasaban y nadie venía.

De pronto un día conmigo a solas, se apagan las luces y con humedad en la frente me pides inesperadamente una salida.

Pasa un minuto y no despierto, mi piel tiembla, una arritmia de mi se apodera. Mi mundo cambia, el yo termina.

Somos nosotros, un par que no conoce lo que se avecina; pero no importa, nada importa si me miras y me besas y de la mano me tomas; y los nervios me colman, si vivimos ahora lo que aguardó mil vistas y cero palabras.

Te quiero, y con un contexto nuevo; no pienso, no existo, mis ojos brillan y las noches frías se volvieron tibias.

Julio César

Creative Commons License
Laguna by Julio César Juárez Xochitemol is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial 4.0 International License.
Permissions beyond the scope of this license may be available at https://julioypoesia.com/contact/.

Cartas varadas I

Soy un aficionado a la poesía; a leerla, pero mucho más a intentar producirla. Sin embargo lo que más he escrito a lo largo de mi vida han sido cartas de amor, muchas de ellas descansan en mis recuerdos, otras definitivamente olvidadas y con suerte, unas pocas arrugadas en alguna caja vieja debajo de una cama.

Y así como guardo una colección de poemas que nunca pude hacer llegar, también guardo cartas de amor y disculpa que tristemente no logré entregar. La mayoría porque me encontraba en tiempo o espacio distinto de aquellas chicas a las que debieron pertenecer y otras por simple falta de valor e iniciativa. Finalmente me daré la oportunidad de publicarlas como una serie dentro de este incipiente blog, y de alguna manera decirle a mi yo del pasado:

¡Por fin las entregamos!

Cartas varadas I

Todo empezó con el equilibrio de nuestras columnas, atracadas, sujetadas la una con la otra.

Los ojos gigantes de nuestra amiga en común, con la indirecta directa a mi mente ¡Serás de ella!

Luego los libros, pasillos llenos de ellos, conglomerado de personas rodeándonos, con un amante lejano tan cerca de ti. Pero al fin y al cabo, solos tú y yo.

Comida chatarra, cerveza casi hirviendo, una película de pretexto; luces apagadas, una amiga menos, un metro de distancia, y de pronto todo cambió. La iniciativa de tus palabras me inmovilizó y el sí era imparable. Nuestros labios ansiosos por estar juntos finalmente, juntos por primera vez.

Comenzaba la cuenta pendiente, diez mil besos menos uno.

Te quiero.

Julio César

Creative Commons License
Cartas varadas I by Julio César Juárez Xochitemol is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial 4.0 International License.
Permissions beyond the scope of this license may be available at https://julioypoesia.com/contact/.